Blue Tears – Dancin’ On The Back Streets
Hace ya casi dos años publiqué en Anhelarium un artículo en homenaje a Gregg Fulkerson y su banda, Blue Tears, un artículo al que le tengo un especial cariño, precisamente por el sentimiento que deposité en él, en cada una de sus líneas, y sobre todo, por lo importante que es la música de Blue Tears en mi vida. Fue precisamente dos años atrás cuando conocí casi de casualidad la música de esta fantástica banda. Sin duda fue Blue Tears la banda que puso la música de aquel verano de 2011 y la que ha acaparado buena parte de la banda sonora de mi vida. Desde entonces, no paro de escuchar sus canciones, éstas me acompañan siempre, a todos lados.
Pocas canciones me hacen sentir igual, tan complacido, tan ilusionado, tan vivo. Lo primero que me llamó la atención de este grupo fueron sus rítmicas melodías, sus estribillos tan diáfanos y alegres, tan pegadizos, pero sobre todo, sus medios tiempos y baladas, canciones cargadas de sentimiento, melancolía, y de nuevo, acompañadas por unos ritmos claros, una armonía perfecta, pura melodía.
En este disco, titulado Dancin’ On The Back Streets, Blue Tears presenta todas esas canciones que hubieran proseguido en esos años de primeros de los 90, las que hubieran continuado la buena onda iniciada con su álbum debut, allá por 1990. Pero la suerte nunca sonrió a Gregg y su banda, el destino quiso que esas canciones vieran la luz en 2005, año en que Gregg, al ver que la pasión por el AOR volvía a resurgir, que surgían grupos nuevos y un numeroso público mostraba interés por este género musical y sobre todo por Blue Tears, decidió editar este y otro disco más, Mad, Bad & Dangerous, disco que igualmente recoge todas esas canciones que la banda tenía preparadas pero que durante más de una década no vieron la luz. Según leí una de las veces que buscaba información sobre Blue Tears, Gregg comprobó cómo muchos amantes de esta música, tanto los más veteranos como los más jóvenes, buscaban como locos canciones de la banda en servidores de música y en foros. Fue Gregg quien subió él mismo los temas a la red y los compartió, y al ver el éxito y la crítica que todos estos temas tenían, la gran aceptación que asomaba, tanto él como la banda decidieron publicar estos dos discos.
En el primer artículo de Blue Tears hacía un breve repaso sobre la historia de Gregg y la banda y recomendaba sus mejores temas. Ahora quiero sólo centrarme en este disco, Dancin’ On The Back Streets, porque por supuesto, más adelante podréis disfrutar en Anhelarium de más artículos dedicados a Blue Tears.
En este álbum volvemos a encontrar auténticos temas, de una grandísima calidad. Siempre me preguntaré, qué hubiese sido si Blue Tears hubiera recibido la atención que se merecía, el apoyo mediático que otras bandas norteamericanas, y de muchísima menos calidad, tenían. No era de extrañar que las bandas norteamericanas tuvieran más prioridad en la MTV durante la eclosión del Hard Rock y Heavy Metal en la década de los 80 y 90. Bandas como Poison, Motley Crüe, Warrant, disfrutaban de una posición envidiable en los más importantes canales musicales tanto en televisión como en radio, pero Blue Tears, una humilde banda procedente de Tennessee, no tuvo lo que merecía. No quiero entrar en comparaciones, porque son odiosas, o eso se dice, pero quien tenga un criterio musical decente y objetivo, sabrá apreciar la música de esta banda y comprobará que nada tenía que envidiarle Blue Tears a grupos como los antes mencionados o incluso grupos de mayor repercusión como los primeros Bon Jovi. Y es que precisamente, si Bon Jovi hubiera sacado como singles algunos de los temas de Blue Tears, éstos hubieran sido todo un éxito mundial.
Hablo de temas como Forever Yours o Small Town Dreams. Canciones que denotan tanta índole, tanta garra y energía, que no entiendo cómo no han tenido una mayor notoriedad, porque muchas bandas matarían por haber compuesto temas como estos. Livin’ In The Movies, Loud Guitars, Fast Cars & Wild, Wild Women, o Summergirl son temas más tópicos del Hard Rock americano de la época, temas clónicos ya que salían grupos con canciones así por un tubo, era la moda, pero aun así, son temas que de haber tenido su hueco en las radios y en aquellos programas de la MTV, fijo que hubieran calado en la sociedad del momento, una sociedad volcada en este género musical que durante más de una década reinó contundentemente como nunca un estilo musical ha hecho.
Otros temas a destacar de este gran disco son Storm In My Heart, una canción conmovedora, enérgica, que no te dejaría nunca indiferente, o Dream Of Me, uno de mis temas favoritos de la banda, todo un portento de canción, con un toque de lo más épico y melódico, y una emotiva letra. En este disco hay un tema que tiene una curiosa historia detrás. Se trata de Date With Destiny, un tema que Gregg compuso para la banda Meat Loaf y que su cantante, Marvin Lee Aday, rechazó sin más miramiento. Si os fijáis bien, la canción se nota que está claramente compuesta para esta banda, ya que el ritmo y la sintonía utilizada es totalmente Meat Loaf al 100%. ¡Marvin se la perdió! Y gracias a que éste la rechazó, tenemos una de las canciones más bonitas que he podido escuchar, ya que Gregg la versionó a piano, dándole a la canción un enfoque apasionado, mucho más emotivo. La versión a piano de Date With Destiny es de los temas más logrados de la banda.
Todos los temas que encuentras en este disco son una auténtica maravilla, y no quiero parecer que pierdo la objetividad y me dejo llevar por la pasión que tengo por este grupo. Si le dedicáis el tiempo que se merecen, veréis que no exagero en lo más mínimo. Y otra prueba de ello es el tema Strong, tema que Gregg versionaría posteriormente en su último proyecto musical, Attraction 65.
Pero volvemos a los temas más altivos, con ese sonido tan noventero y anímico que solo el Hard Rock de la época supo transmitir. She’s Not Falling In Love es otro de esos temas con un estribillo y coros bailables, como también posee Do You Want Me, Hard Rock en su pura esencia. All Cried Out, Kiss And Tell y Slip And Fall, son otros temas que destaco principalmente por esa esencia tan hardrockera de la época, canciones que te trasladan a esos años de principio de los 90 y te invitan a recordar con añoranza. Sobre todo Slip And Fall, un tema soberbio, de esos que te gusta escuchar en un bar mientras disfrutas de tus buenos amigos y unas cervezas. Siempre que escucho este tema me imagino la misma escena: yo y unos amigos, en un antro de lo más rockero, y esa chica que tanto me gusta, al fondo del bar, sentada con sus amigas y lanzándome miradas con picardía. ¡Esta canción invita a uno a lanzarse de lleno!
Muchas son las sensaciones que tengo cuando escucho la discografía de Blue Tears. Al principio, cuando comencé a meterme de lleno en su música, me encantaba descubrir todos y cada uno de los temas, me parecía increíble que una banda pudiera publicar tantísimos buenos temas, uno tras otro, sin ningún tema de relleno, todos aportando algo distinto, era como ir abriendo regalos, primero uno, luego otro, por cada canción, una sorpresa, por cada canción, una emoción. Es ahora, dos años después de haberles conocido, dos años en los que su música ha sido esencial en mi vida, y a día de hoy sigo sorprendiendome con cada escucha, donde descubro matices nuevos, pasajes instrumentales donde me recreo mejor que antes.
Me sigo llevando las manos a la cabeza cuando veo cómo temas así han caído durante tantos años en el olvido, cuando escucho estas canciones y veo cómo podrían haber calado en tantísima gente, porque al no tener la repercusión que se mereció, las composiciones de Gregg no han llegado a todos aquellos amantes del Rock más melódico y nostálgico, y es por eso que intento dar cierta cobertura a Blue Tears desde Anhelarium, porque sé que hay muchos ahí fuera, que no conocen esta música y seguro estarían encantados de conocerla, porque ahí fuera, sé que puede haber otra persona que como yo, quede prendada de la música de Blue Tears. Nunca es tarde para deleitarse, emocionarse y sentir con los nuestros, acompañados de una música así.
Y pensar que este disco casi no sale a la luz… OMG!
Recuerdas aquel día de abril del año pasado, que buscando la letra de Dream Of Me acabé encontrando tu otro artículo sobre Blue Tears de Anhelarium? :D. Antes de eso Blue Tears ya era mi grupo infravalorado favorito, imagínate después de semejante descubrimiento :P.
Por cierto, hay 2 canciones del disco que no has comentado; Touch y Dark Of The Night. Pobrecitas, o como crees que diría yo, pobriñas 😦 xD.
5 mayo, 2013 en 22:10
Pues sí, me las he dejado sin querer, pero bueno, lo más importante y destacable de este grandísimo disco está ahí reseñado en el artículo y con mucho cariño y atención.
Como habrás leído, hablo de Blue Tears en Anhelarium porque es una parte importante para mí, pero también pretendo hacerlo de aquí en adelante con la intención de darle un poco de cobertura a este grupo. Precisamente, porque lo que a mí me pasó hace dos años, o a ti, le puede pasar a mucha más gente. Este verano, de casualidad, un amante de este género puede entrar en Anhelarium y ver los artículos de Blue Tears, y quén sabe si puede prendarse de su música o no. Yo lo veo la mar de probable. Imposible que alguien metido en este rollo del Rock melódico muestre indiferencia con este grupo.
Un abrazo, Néstor.
6 mayo, 2013 en 16:36